La
señora que se acerca a otra para contarle un chisme y baja considerablemente la
voz para dejar claro que es una confidencia, hasta convertirla en un
musitar, un hilillo de voz casi inaudible, un 'jjjjjjj' similar al que emite el silencio. "Mira
Juana, le pones
un poco
de romero, un chorrito de
vino blanco...". ¿Pero qué hacen? Si no hay nadie cerca... Si ni siquiera es
un secreto enumerar los ingredientes de un cocido... Las señoras hablan
tan bajo que emiten ondas ultrasónicas e inhiben la cobertura delos móviles y los
perros ladran de dolor y hacen que a la gente le sangre la nariz y contraiga cánceres.
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